Sostenibilidad en las empresas: de término de moda a aspecto crítico para el negocio
Las empresas que han adoptado los principios ESG a sus políticas corporativas se han visto beneficiadas económicamente de ello, tal como se ha demostrado en análisis previos. Sin embargo, ahora crece la preocupación entre el empresariado de que ese beneficio se vea ensombrecido por una nueva oleada de normativas que obligará a cada compañía a responder de la sostenibilidad de cada eslabón de su cadena de suministro mundial.
La red de firmas de asesoría fiscal y auditoría de MOORE Global ha llevado a cabo un proyecto de investigación a largo plazo para seguir la evolución de los tres pilares ESG, es decir, los aspectos medioambientales, sociales y de buen gobierno corporativo que las empresas de cualquier tamaño deben tener en cuenta a la hora de planificar sus estrategias de futuro.
Según Anton Colella, CEO de MOORE Global, el estudio realizado para MOORE por el Centre for Economic and Business Research (Cebr) es «uno de los análisis más completos sobre la actitud de las empresas medianas respecto a los ESG, la gestión de riesgos y la gobernanza». En él, y gracias a la amplia visión de mercado a nivel internacional y multisectorial de MOORE Global, se reflejan las actitudes y preocupaciones cambiantes de casi 4.000 líderes empresariales de 12 economías clave de América, Europa, Asia, África y Oriente Medio a lo largo de tres años.
Las principales conclusiones de este análisis revelan que, a lo largo de los tres años de investigación, la sostenibilidad y los ESG han crecido en relevancia para inversores, bancos, reguladores y clientes, y se demuestra, según Colella, que «la sostenibilidad ha pasado de ser una palabra de moda en las salas de juntas a ser un aspecto crítico para el negocio».
Los resultados indican que casi la mitad (46,5%) de las empresas encuestadas por MOORE Global han implantado prácticas de buen gobierno corporativo para hacer frente a un mayor nivel de exigencia, pero les preocupan los riesgos externos como las interrupciones de la cadena de suministro y los ataques a la ciberseguridad, que podrían afectar a sus esfuerzos por cumplir las nuevas normas.
En la actualidad, además, asistimos al surgimiento de un nuevo marco regulador que aumentará la diligencia debida y exigirá a las empresas que auditen sus actividades para adherirse a un régimen de gobierno corporativo más estricto.
La presión regulatoria sobre la sostenibilidad en las empresas
Mark Stewart, responsable mundial de ESG en MOORE Global, afirma que «Lo que estamos viendo es un panorama normativo que cambia rápidamente para las empresas medianas de todo el mundo».
En este sentido, la Directiva de la UE sobre informes de sostenibilidad corporativa (CSRD por sus siglas en inglés) exige a las empresas que informen sobre el impacto de sus actividades en el medio ambiente y la sociedad. Por su parte, el Consejo Internacional de Normas de Sostenibilidad pretende establecer una base mundial de normas de información sobre sostenibilidad, centrada en las necesidades de los inversores.
En Estados Unidos, se ha propuesto un cambio en el Reglamento Federal de Adquisiciones que obligaría a determinados contratistas federales a informar sobre sus emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) y el riesgo financiero relacionado con el clima. También tendrían que fijar objetivos con base científica para reducir sus emisiones de GEI.
Sin embargo, el estudio de MOORE Global revela que sólo el 55% de las empresas encuestadas confía en que su compañía esté al corriente de los próximos cambios normativos. Entre los directivos de estas empresas el motivo más común de duda, según el 39% de los encuestados, es la complejidad de los requisitos. Otras razones alegadas fueron la falta de información u orientación claras sobre los cambios normativos (38%); la escasez de recursos o conocimientos internos para mantenerse al día de las actualizaciones (36%) y las dificultades anteriores para cumplir los cambios regulatorios (30%).
A pesar de todo, más del 80% de las empresas encuestadas ya han realizado algún ajuste en sus operaciones en respuesta a los próximos cambios normativos, aunque el contraste entre las mayores economías del mundo es notable: Si en EE.UU., el 42% de las empresas encuestadas, (el equivalente a un universo de 22.000 empresas), ya han modificado significativamente sus operaciones en respuesta a los próximos cambios de regulación, los índices de movilización entre los miembros europeos del G7 (Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido) se sitúan entre el 30% y el 35%. Mientras, en Japón, la tercera economía mundial, sólo un 11% de empresas han modificado sus prácticas empresariales en respuesta a las próximas normativas.
El beneficio frente al perjuicio en la sostenibilidad en las empresas
La burocracia de una mayor regulación se cita a menudo como un lastre para las empresas y el crecimiento económico, pero la encuesta de MOORE Global muestra que las compañías que han adoptado el nuevo régimen ESG han disfrutado de beneficios financieros. De los responsables de la toma de decisiones encuestados, el 63% declaró que los cambios normativos anteriores habían tenido un impacto positivo en las finanzas de su organización y un número similar (57%) espera que los próximos cambios también tengan un impacto positivo en el balance final. Sin embargo, este optimismo no es universal y es compartido por menos de la mitad del empresariado en economías emergentes como Brasil, Sudáfrica o los Emiratos Árabes.
Las nuevas normativas conllevan la necesidad de una mayor supervisión. Una vez más, la preparación es desigual en todo el mundo. Alrededor del 46% de los directivos de empresas ya han implantado prácticas de gobernanza exhaustivas, pero casi el mismo número, el 42%, afirma haber introducido algunas medidas «pero hay margen de mejora».
El área de MOORE Global ESG, gracias a su amplio conocimiento y experiencia internacional, tiene la capacidad para ayudar a las empresas a alcanzar los requisitos de responsabilidad social y obtener beneficio de ello, trabajando en cada uno de los tres pilares: medio ambiente, social y buen gobierno corporativo. Aunque de entrada puede parecer una tarea inabarcable, MOORE Global está ayudando a sus clientes a dividir el proceso en fases pequeñas y manejables para gestionar la transición.
Además, MOORE España cuenta con una división específica de consultoría para asesorar a sus clientes en materias de sostenibilidad en las empresas, un servicio que abarca la elaboración de los Informes de Sostenibilidad y los informes de verificación.